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Luis Guillermo Zabaleta, ex acordeonero de Felipe Peláez, encendió tremenda polémica porque critica a su colega Juancho de la Espriella, actual compañero de Silvestre Dangond, porque en el video de ‘El Cantinero’, «promueve licor y eso no es propio de Dios». Recordemos, que Zabaleta se retiró de la actividad comercial para dedicarse a los caminos de Dios y De la Espriella, se bautizó recientemente en Valledupar, como un fiel creyente del Señor.
Intervallenato.com, interpretando el interés de esta polémica reproduce las publicaciones del periódico El Heraldo.
La noticia tomada de El Heraldo
«Los borrachos no entrarán al reino de los cielos»: Zabaleta
“Los fornicarios, ni los idólatras, ni los adúlteros, ni los homosexuales, ni los ladrones, ni los avaros, ni los borrachos heredarán el reino de Dios”.
Trayendo a colación este aparte de la Biblia, del libro Primera de Corintios 6: 9-11, Luis Guillermo Zabaleta, exacordeonista del cantante Felipe Peláez, señala que se siente “indignado” con la posición de su colega Juan Mario De la Espriella, quien en días pasados, en entrevista para EL HERALDO, manifestó que se había bautizado y convertido al cristianismo.
Para Zabaleta este es un gesto reprochable teniendo en cuenta que sigue haciendo parte de la organización vallenata de Silvestre Dangond.
“En la palabra de Dios, los músicos somos tratados como ministros, porque esta toca el alma, los sentimientos. La música puede ponerte triste, alegre, te hace llorar o reír”.
Con esta explicación, Zabaleta señala que su colega es mal ejemplo para todas las personas que quieran seguir a Dios o que le estén sirviendo, pues no ejecuta el acordeón en temas cristianos sino “mundanos”.
“Promoviendo el licor”
Es preciso en señalar que De la Espriella en el video Cantinero hace las veces del expendedor del licor, por si fuera poco el estribillo del tema una y otra vez repite: Cantinero, deme un trago, dos tragos, tres tragos y coloque esas canciones que ahogan las penas…
“¡No!, en este video no hay testimonio alguno. De la Espriella promueve el consumo del licor a través de esta canción, y los borrachos no entrarán al reino de los cielos”, reitera Zabaleta quien seguidamente, afirma que desde hace un año prefirió dejar a un lado sus compromisos con la banda de Felipe Peláez, para seguir el evangelio.
Mientras hojea la Biblia, Luis Guillermo recuerda un aparte de la publicación de este diario. “El periodista le pregunta, ¿qué si haberse convertido al cristianismo implica retirarse de la música vallenata?”.
Moviendo su cabeza, en gesto de reproche, Zabaleta dice que se indignó al leer que De la Espriella expresó que Dios no manda a ninguno que se retire de su trabajo.
“En este caso Juan Mario y yo, con quien he compartido la Biblia, tenemos una discusión bien grande porque uno no puede servirle a dos dioses”.
Zabaleta hace un llamado a su colega, a quien lo invita a que sea obediente a los designios Divinos. Por último manifestó: Qué ejemplo puede dar Juan Mario, quien aparece junto al cantante Silvestre Dangond, brindando con una copa e incitando a la inmoralidad.
Responde Juancho de la Espriella
El acordeonero Juancho De La Espriella respondió a las acusaciones que realizó hoy Luis Guillermo Zabaleta, ex acordeonero del cantante Pipe Peláez, sobre su posición de convertirse al cristianismo y seguir al lado de la agrupación de Silvestre Dangond. Para Zabaleta esto fue un gesto reprochable y señaló que De La Espriella es un mal ejemplo para todas las personas que quieran seguir a Dios.
De La Espriella respondió en su página web a través de una crónica que él mismo tituló “¿Diablo o bendición?”, y que está siendo altamente comentada e interpretada en todas las redes sociales.
Juancho fue claro al afirmar que respeta a los colegas que se salgan de la música para seguir el camino de Dios, pero que existen otras personas que “quieren quedarse en su trabajo, afianzándose más, amándolo más, y no por esto no somos seguidores de Cristo o no vivimos en sus preceptos”.
El compañero de Silvestre Dangond agregó que su don de tocar acordeón viene de Dios y no es culpable de lo que otras personas quieran hacer con él. Aunque asegura que existen más fanáticos que lo disfrutan sanamente y se divierten con sus melodías, como “los niños que gozan, bailan y brincan con la música de la agrupación”.
A continuación EL HERALDO les presenta la crónica completa que redactó Juancho De La Espriella en su página web:
¿Diablo o bendición?
Esta es la polémica a la cual se quiere someter a cualquier músico que quiere acercarse a caminar con Jesús.
“Debes salir de la música secular (así le llaman a lo que no es música cristiana) para poder servir a Dios”, es una de las expresiones que se nos hacen a músicos que estamos siguiendo a Cristo o a los que buscan seguirlo.
He tenido la oportunidad de debatir este tema con otros colegas que creen en Cristo, pastores, etc. y lo primero que puedo concluir es que todos los casos son diferentes, pueden existir colegas que sientan salir por un llamado que Dios les hace (caso que es absolutamente respetable) como podemos encontrar otros que queremos quedarnos en nuestro trabajo, más bien nos afianzamos más, lo amamos más, y no por esto no somos seguidores de Cristo o no vivimos en sus preceptos.
Un consejo: los que quieran o sientan salir asegúrense de que este llamado venga de Dios (espíritu santo) y no de pastores o compañeros cristianos, que están presionando dicho retiro, con el argumento de que si te quedas, estas pecando. OJO CON ESTO.
“Que yo ínsito a las personas con mí música a beber, a fornicar, a drogarse, etc.” Otro argumento que algunos dan, pues en mí caso me da mucha pena, pero mí don de tocar acordeón, viene de Dios, lo hago con amor, con pasión y con respeto, no soy responsable de lo que algunos quieran hacer con él, aunque estoy seguro que son muchas más las personas que se alegran y divierten sanamente, sin excesos. (Entre estas una gran cantidad de niños, que gozan, bailan y brincan con nuestra música).
Retomando el título de esta crónica, creo que lo que algunos ven como “DIABLO”, yo lo veo y lo siento como una de las grandes “BENDICIONES” de mí vida, el amor por la música vallenata y por ende interpretar el acordeón.
El punto principal de esta polémica es de respeto y tolerancia, los que han salido, tendrán sus razones, pero no pueden volver de esto una regla para los demás, no es justo, ni correcto; soy un convencido que podemos servir a Dios y dar ejemplo donde estemos sin necesidad de movernos, de hecho creo que un testimonio bien dado en este medio, es mucho más valioso y podrá servir de ejemplo a muchas personas que todavía no siguen a Cristo.
¿Diablo o bendición? , indudablemente en mí caso, BENDICIÓN, sueños cumplidos y por cumplir, la forma que DIOS me regalo para mí sustento, la felicidad que me produce escuchar buena música vallenata, definitivamente mí profesión no es sólo un regalo de DIOS, es una BENDICIÓN.
Por Juancho De La Espriella S.
Reacciones en las redes sociales:
@Jmartinezdonado: ¿qué tal las declaraciones de Luis Zabaleta en El Heraldo? Yo creo más en la convicción de Juancho que en la alharaca de Zabaleta.
@dnielbarrios: díganle a Zabaleta que no venga tirárselas de muy santo y que viva su religión solo sin señalar a nadie, payaso.
@jessymarg: estoy de acuerdo y apoyo totalmente a ‘Juancho’.
Jairo Gutiérrez: me parece una ridiculez de parte del señor Zabaleta. O sea, ¿él que se entregue al cristianismo debe morir al mundo? que pensamiento tan retrógrado. Pobrecito.
Alexander Castro Marín: lo que pasa es que todo diablo o demonio que obra mal quiere salpicar todas sus culpas así, en esas religiones, y decir que cambio porque Dios lo tocó, además uno cambia por uno mismo y no tiene que ponerse en esas ridiculeces. Deje que los demás vivan.
Milton Orozco: en su nuevo plan de fanático Zabaleta sufrirá mucho. Criticará todo de ahora en adelante.
Linda Valentina: eso es como los que se meten en la religión a lavar culpas, y como se nota que Zabaleta ya no tiene nada que hacer. ¿Cómo va a salir a regañar a ‘Juancho’ en un medio informativo? Cada quien vive su vida como le parezca.
Carlos Altamar: hay muchos profetas modernos que se aprovechan de la fe de los incautos para enriquecerse a costa de los demás.
Ligia Becerra Pombo: bueno y ¿Cristo no bebió vino en las ‘Bodas de Cana’? Eso de juzgar le toca a Dios, no ha nosotros.
Serje Hard: Yo pienso que la religión es un estilo de vida, quizás él no se sentía bien con lo que estaba haciendo. Cuando somos buenos criticamos y cuando somos malos también. Ahora no hay pecado grande ni tampoco chico, todos somos pecadores, en algún momento de nuestra vida nos tocará dar el primer paso.
Hugo Salgado: estos ídolos con rabo de paja se hacen ‘pastores’, se las dan de santos y comienzan a señalar a todo el mundo como si su religión o sus actos fueran los perfectos. Se las tiran de redentores, de profetas.
Jules Draco: la religión es el opio del pueblo, la Fe la llevamos en nuestros actos.
David Rolong Schweiger: prefiero ver un cristiano que se meta sus traguitos y no a un cristiano que se eche la bendición para que le salga bien un delito.
David Ramírez: A mí me da risa porque a Dios rogando y con el mazo dando. Hay que ser real y no decir Dios te bendiga cuando maldices y envidias a tu hermano. Entonces no te engañes a ti mismo, que santo no eres Zabaleta, el único santo es Dios. Arrepiéntete de corazón, vive tu vida y deja vivir la de los demás.
Milena Lucia Calderón Morron: cuando Dios empieza su obra restauradora en la vida de alguien, él la termina. No olvidemos que todos somos hechos del mismo material: barro, que se puede romper en cualquier momento. Y el alfarero toma su tiempo para moldear su obra. Dios es un Dios que personaliza y a cada uno atiende de forma particular y en su tiempo específico para concluir sus propósitos en la vida de sus hijos. Los juicios solo le pertenecen a Dios. Los cuestionamientos pierden valor cuando entramos a tomar el rol de Dios señalando a otros.
Orlando Pión Tarazona: los evangélicos que dicen ser cristianos y se retiran de la música secular lo hacen más por negocio que por otra cosa. Que visión tan equivocada tienen muchas personas que dicen llamarse cristianas, piensan que todas las personas deben aislarse de las actividades cotidianas y dejar a un lado la alegría, sociedad, cultura y expresiones artísticas.
Por William González Badillo
Redactor ELHERALDO.CO
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